Todas las personas tienen metas, un sueño o un objetivo. Para muchos, es el de convertirse en un traductor de inglés profesional. Y sí, podría pensar que es un trabajo sobrevalorado porque existen miles de aplicaciones de traducción en Internet. Sin embargo, los traductores profesionales siguen siendo increíblemente demandados en el mundo. ¿Por qué? La razón es simple, pueden brindar traducciones precisas, claras y confiables.
Sin importar el idioma que elija (comúnmente el inglés), si tiene las habilidades y las calificaciones necesarias, puede encontrar trabajo traduciendo de ese idioma a su idioma nativo o viceversa. El trabajo de traductor es muy versátil. Puede conseguir trabajos de traducción autónoma o trabajar para una agencia o empleador, tal vez incluso para el Estado.
¿Qué hacen los traductores?
Aunque pueda crear algo de confusión, interpretar y traducir son dos cosas diferentes. Si bien ambos trabajos requieren la interacción de dos idiomas, en la interpretación se habla, mientras que en la traducción se escribe, por lo tanto, el trabajo de un traductor profesional se trata de traducir textos escritos entre idiomas.
Con frecuencia, los traductores traducen de un idioma extranjero a su idioma natal. Aun cuando los traductores pueden comprender en totalidad ese idioma extranjero y escribir perfectamente en él, escribir en su idioma nativo suele ser mucho más fácil y el texto resultante sale más fluido y natural.
Puede encontrar traductores en cientos de industrias y empresas distintas, desde el gobierno hasta la medicina, pasado por la educación, los medios de comunicación y todo lo demás. Cualquier ámbito en el que se utilice el lenguaje podría necesitar un traductor eventualmente.
Estas personas tienden a trabajar por cuenta propia o a ser dueños de sus propios negocios. No obstante, algunos trabajan para agencias o directamente con un empleador. Esto proporciona un gran nivel de flexibilidad para decidir si desean tener un flujo de trabajo constante o si prefieren administrar su horario a su conveniencia.
¿Qué se necesita para ser un traductor profesional?
Conocimientos avanzados de idiomas
Es imposible traducir algo que no entiendes. Y si no comprende el texto o el idioma en su totalidad, es posible que lo malinterprete y entregue una traducción sacada de contexto. Los traductores de calidad deben entender todo el significado, pasando por los sutiles matices implícitos en el texto. Tal nivel de entendimiento, requiere un conocimiento avanzado, cercano al nivel de un nativo.
Buenas habilidades de escritura
Para ser un excelente traductor, debes tener habilidad con las palabras. Es decir, escribir con propiedad. Este trabajo requiere que se escriba en una amplia variedad de temas y estilos. Desde promociones, hasta formas legales y de vez en cuando, documentos técnicos. Si bien esta es una habilidad nata en muchas personas, también se puede mejorar y perfeccionar con el paso del tiempo y la experiencia.
Profundo conocimiento cultural
Los traductores profesionales necesitan de un conocimiento profundo de la cultura para la que están trabajando. Este conocimiento engloba los sistemas de valores y la perspectiva de sus habitantes hacia el mundo. Es vital conocer aspectos específicos como sus pasatiempos, costumbres y su rutina general.
La mayoría del tiempo, este conocimiento es el que los ayudará a comprender el significado y las implicaciones del texto que están traduciendo. Además, reconocer las diferencias, le dará pistas sobre qué cosas funcionan mejor para el texto y qué cosas podría mejorar.
Habilidades de investigación
Los traductores nunca paran de estudiar. Constantemente deben hacer investigaciones sobre redacción, significados, jerga, vocabulario y contextos. Cuanto más puedan nutrirse sobre el tema, mejor.
Entender los procesos que conlleva la traducción
La traducción es un reto mental y es muy sencillo cometer algún error. El lenguaje es flexible, por lo que una cosa podría tener cientos de implicaciones distintas. Debido a esto, los buenos traductores deben apegarse a procesos que les garanticen exactitud.
Juicio claro
En la traducción hay que tomar decisiones todo el tiempo. Ya sean sobre el vocabulario, las estructuras que serán utilizadas, cuándo ser literal, cuando ser más libre o incluso cuánto se debe investigar para un tema. Mucho de esto es meramente instintivo, pero con el esfuerzo adecuado, cualquier persona puede mejorar esta habilidad básica considerablemente.
¿Cómo puede mejorar sus habilidades?
- Estudie traducción: Apúntese a un curso que incluya muchas prácticas de traducción acompañado con comentarios constructivos del facilitador.
- Trabaje de la mano de un colega: Conozca el trabajo de los demás y aprendan uno del otro.
- Busque un mentor: Consiga un traductor profesional que esté dispuesto a ayudarlo a perfeccionar sus habilidades.
- Sea crítico con su trabajo: Revise sus traducciones pasadas y encuentre una forma de mejorarlas.
- Gane experiencia: Cuánto más traduzcas, más desarrollarás tus habilidades. Sobre todo si consigues personas que valoren tu trabajo y te den comentarios constructivos que te ayuden a crecer profesionalmente.